Hoy en día, es frecuente ver que los niños pasan más tiempo enfocados en la escuela que jugando, y en ocasiones, sus intentos de jugar se ven limitados por sus padres. Esto se debe a que la educación comienza a una edad más temprana, reduciendo las horas de juego de los niños. Además, la forma en que juegan ha cambiado debido a la globalización y los avances tecnológicos. Los juegos al aire libre son menos comunes y han sido reemplazados por juegos virtuales que se juegan frente a una pantalla. Esto plantea una pregunta importante: ¿Cómo pueden estos cambios afectar a los niños? La respuesta es compleja, ya que estos cambios tienen un impacto en diferentes áreas, incluyendo las habilidades sociales.
La importancia de aprender a través del juego
Los primeros años de vida son fundamentales para nuestro crecimiento, ya que sientan las bases para nuestra vida futura. Por eso, es crucial invertir en el desarrollo de habilidades desde temprana edad, y el juego desempeña un papel esencial en este proceso de aprendizaje durante la infancia.
Un dato interesante es que el 75% del desarrollo cerebral ocurre después del nacimiento, y el juego desempeña un papel crucial al ayudar a establecer conexiones entre las células nerviosas en el cerebro.
Según una investigación realizada por las expertas en familia Sandra J. Bailey y Jona K. Anderson-McNamee, el juego es una de las formas en que los niños se conectan con sus padres, aprenden las normas familiares y obtienen su primera guía sobre cómo comportarse en la sociedad. Es una herramienta fundamental que les permite comprenderse a sí mismos, encontrar su lugar en el mundo y relacionarse con los demás, comenzando por sus padres y cuidadores.
El juego no tiene que ser necesariamente estructurado; también puede ser espontáneo, como cuando los padres interactúan de manera cariñosa con sus hijos, lo que lleva a recompensas emocionales y un intercambio de sentimientos.
El juego es un poderoso mecanismo que contribuye al desarrollo de habilidades sociales, motoras y cognitivas. Por lo tanto, es esencial que las madres, padres, familiares y cuidadores dediquen tiempo a jugar con sus hijos para promover un desarrollo saludable.
¿Qué significan las habilidades sociales?
Hoy en día, escuchamos mucho sobre las «habilidades sociales» y a menudo se asocian con la cantidad de amigos que una persona tiene, la cantidad de fiestas a las que asiste o si sus gustos son diferentes a los de la mayoría. Pero, ¿realmente estas características determinan la presencia o ausencia de habilidades sociales? La respuesta es NO. Las habilidades sociales se refieren a cómo nos relacionamos con los demás, cómo nos expresamos y cómo defendemos nuestros derechos.
No salir a fiestas o tener gustos diferentes no indica carecer de habilidades sociales. Cada persona tiene su propia forma de ser y algunos pueden preferir pasar tiempo de manera más tranquila. No tener muchos amigos no significa no tener ninguno; algunas personas valoran la calidad sobre la cantidad en sus amistades y saben expresarse cuando es necesario (lo cual es una característica de habilidades sociales adecuadas).
Para una definición más precisa, las habilidades sociales son el conjunto de comportamientos que una persona muestra en situaciones de interacción con otros. Esto implica expresar sus sentimientos, actitudes, deseos, opiniones o derechos de manera apropiada para la situación, al mismo tiempo que respeta las expresiones de los demás. Estas habilidades nos ayudan a resolver problemas en el momento presente mientras minimizan la probabilidad de conflictos futuros.
La Importancia de Jugar con los Niños
A pesar de las demandas de la vida moderna, encontrar tiempo de calidad para jugar con los niños es esencial. Esto no solo promueve el desarrollo de sus habilidades sociales y construye vínculos afectivos sólidos, sino que también beneficia a los adultos al reducir el estrés y al permitirles conocer mejor a los niños.
Jugar también desempeña un papel importante en el desarrollo de la autoestima de los niños. A través de la motivación que los padres y cuidadores transmiten con mensajes positivos durante el juego, los niños empiezan a comprender su importancia en el mundo y a desarrollar una visión de su lugar en él.
Las actividades familiares, como el juego, son fundamentales para fortalecer los lazos familiares. Fomentan la solidaridad y la comunicación, ya que enseñan valiosas lecciones sobre ganar, perder, seguir instrucciones y compartir turnos.
Incluso actividades tan simples como escuchar música, cantar o tocar instrumentos con los niños pueden tener un impacto positivo en su desarrollo. Esto les ayuda a reconocer patrones en la música, lo que, a largo plazo, puede influir en sus habilidades matemáticas en la escuela.
El juego y las habilidades sociales están entrelazados de formas importantes. Desde temprana edad, los niños comienzan a jugar con otros y aprenden valiosas lecciones sobre cómo interactuar en sociedad. Aquí te explicamos cómo el juego fomenta el desarrollo de habilidades sociales y cómo puedes apoyar a tus hijos en este proceso.
Comunicación
• Enséñales a tus hijos cómo llamar la atención de otros de manera adecuada, como tocar suavemente el hombro y esperar a que los miren.
• Anímales a expresar sus deseos y necesidades de manera directa y respetuosa.
• Explícales cómo unirse a un grupo de juego observando y luego encontrando una forma de participar.
Cooperación
• Fomenta el compartir, tomar turnos y llegar a compromisos en situaciones de juego.
• Ayuda a tus hijos a entender que compartir puede ser beneficioso y cómo negociar turnos y compartir recursos.
Resolución de Problemas
• Los conflictos son parte del juego, enséñales a resolverlos colaborativamente.
• Introduce a tus hijos en el proceso de negociación, desde identificar el problema hasta implementar y evaluar la solución acordada.
Perspectiva
• Ayuda a tus hijos a entender cómo se sienten los demás y cómo su comportamiento puede afectar a los demás.
• Fomenta la empatía al señalar las emociones de los demás y cómo diferentes personas pueden ver las cosas de manera diferente.
El juego social es una parte fundamental del desarrollo de habilidades sociales en los niños. Apoya a tus hijos brindándoles oportunidades para el juego social y modelando comportamientos sociales positivos. A medida que practican estas habilidades, estarán mejor preparados para interactuar con éxito en la escuela y en la vida en general. ¡Además, se divertirán mucho en el proceso!
Juegos para Desarrollar Habilidades: Aprendiendo a Través del Juego
Entendemos la importancia del juego en el desarrollo de habilidades en los niños. El juego es un derecho fundamental que debe ser priorizado en las familias, las escuelas.
1. Dibujar: Fomenta la creatividad y la coordinación mano-ojo. Los niños pueden expresar sus ideas y emociones a través del arte.
2 Recortar: Mejora las habilidades motoras finas y la concentración. Cortar y ensamblar elementos ayuda a desarrollar la destreza.
3. Conectar: Juegos que involucran la construcción de conexiones, como rompecabezas o bloques, estimulan la resolución de problemas y la planificación.
4. Construir: Los juegos de construcción permiten a los niños crear y diseñar, lo que desarrolla la imaginación y la habilidad espacial.
5. Narrar: Fomenta la comunicación y el pensamiento crítico. Contar historias o representar roles en juegos de roles desarrolla habilidades lingüísticas y sociales.
En resumen
• El juego es una oportunidad de aprendizaje que mejora las habilidades de comunicación e interacción.
• Debe darse tiempo para que los niños se diviertan y se aliente el juego al aire libre para promover la interacción y la actividad física.
• La interacción entre niños a través del juego contribuye a definir sus características individuales y a conocerse mejor a sí mismos.